El escenario económico de hoy día ha obligado a las empresas a ser mucho más analíticos a la hora de tomar decisiones. Y para ello es esencial saber qué debe hacerse y cómo para evitar errores y desaprovechar oportunidades. Esto es clave en el sector inmobiliario, donde es fundamental gestionar adecuadamente la relación con los clientes.
Por ello, para encontrar soluciones y manejar la información de forma correcta es esencial implementar un sistema BI o Business Intelligence y CRM. El Business Intelligence (sistemas de inteligencia de negocios) que consiste en soluciones diseñadas para convertir datos en información e información en conocimiento. Esto es lo que ayudará a la empresa a saber qué está sucediendo en el mercado para así tomar las decisiones necesarias.
Pero para poder aprovechar los sistemas de Business Intelligence y que puedan convertirse en una guía para la toma de decisiones empresariales, es necesario contar con un sistema que permita recabar información de utilidad. Es aquí donde entra en juego el CRM. El Customer Relationship Management es básicamente un software que gestiona toda la información relacionada con los clientes. Es una manera de llevar a cabo de forma automatizada todos los procesos de negocio como actividades de venta, de comercialización, facturación, soporte técnico, entre otras cosas.
Ventajas de usar un CRM en una empresa inmobiliaria
Hasta hace unos años los softwares de gestión como los CRM no estaban al alcance de todas las empresas y solo eran utilizados por grandes compañías. Esto no solo se debía al elevado costo de estos sistemas sino además al hecho de que muchas empresas, sobre todo las pequeñas, no veían la necesidad de implementarlos.
Sin embargo, poco a poco muchos sectores como el inmobiliario entendieron la importancia de su uso. La llegada de la nube también amplió las posibilidades de gestionar estos programas de forma online y más barata. Las empresas inmobiliarias necesitan poder gestionar su base de clientes de una manera eficiente. Y los CRM son la herramienta perfecta para ello.
Contar con este tipo de programas ofrece diversas ventajas. A continuación presentamos algunas de ellas.
- Centraliza la información. Toda empresa debe poder contar con todos los datos de sus clientes. Los CRM ayudan a tener toda esta información en un solo lugar. Lo que significa que es fácilmente localizable.
- Ahorra tiempo. Este es un punto clave para cualquier empresa. Con este software de gestión los procesos se automatizan, por lo que estos requieren de menos tiempo para su ejecución.
- Ayuda a conocer mejor a los clientes. Al contar con toda la información centralizada de los clientes, podrás tener una visión más completa de su perfil. Ten en cuenta que para vender todo negocio necesita conocer a sus clientes. Solo al conocer sus hábitos, necesidades y preferencias es que podrás adelantarte a la competencia y además encontrar nuevas oportunidades de negocio.
- Mejora la atención al cliente. En el sector inmobiliario, dar un trato personalizado es fundamental. Pero esto es algo que se imposibilita a medida que crece la cartera de clientes. El CRM es la herramienta perfecta para hacer seguimiento de cada uno de los clientes.
Ventajas de implementar un sistema de Business Intelligence
Los sistemas de Business Intelligence están basados en cuatro puntos clave: recolección de información, cruce de datos, detección de patrones o comportamientos y proporcionamiento de indicadores, sus correlaciones y el grado de avance o cumplimiento.
Estos elementos son vitales para medir y analizar todos los factores que influyen en la toma de decisiones. Por ello, es evidente que son muchos los beneficios que se pueden obtener al implementar un sistema de Business Intelligence.
Estos son algunos de ellos. Aumenta la eficiencia. Cuando se dispone de la información de cada departamento de forma centralizada es más fácil utilizar dicha información por estar organizada. Mejora la toma de decisiones. Implementando un sistema de Business Intelligence, las decisiones que se toman son más seguras porque están basadas en datos reales, que han sido clasificados y contrastados. Se conoce el comportamiento del usuario. Con estas soluciones se conoce bien qué es lo que hace el usuario, así como sus preferencias. Esto ayuda a crear mejores campañas diseñadas para el target correcto.
